Escuelas de Verano para todos

·
Desde el 23 de junio y hasta el 31 de agosto, chicos y chicas con distintas minusvalías disfrutan de una Escuela de Verano acorde a sus necesidades
La Asociación Pro-Minusválidos Brazos Abiertos, en colaboración con el Ayuntamiento de Argamasilla de Alba, ha organizado un completo programa de talleres, para continuar durante el verano con las actividades que realizan el resto del año desde la asociación, adaptándolas a este periodo, haciéndolas más amenas y entretenidas.   Aunque el trabajo en el invernadero (principal actividad de la asociación) dura todo el año, esta escuela de verano quiere ofrecer a los chicos otras alternativas distintas para el periodo estival.   Disfrazadas de actividades lúdicas,  como: juegos libres y dirigidos, informática, cuenta-cuentos, piscina y distintos talleres de manualidades, la escuela, pretende que desarrollen las distintas modalidades sensoriales y motoras, al tiempo que aprenden rutinas elementales, como son hábitos de higiene, habilidades domesticas o se ejercitan en el reconocimiento y separación de los distintos alimentos (los más pequeños).  Para ello, no se han preparado talleres específicos, sino que en cada uno de ellos se han generalizado los objetivos.   Otros talleres como risoterapia, les ayudan a ganar autoestima y a vencer la timidez al hablar en público o a mirar a la gente a la cara cuando están manteniendo una conversación.   Pero las actividades que más éxito tienen y gustan, son todas las que se realizan en la piscina. Actividades como hidroterapia, dirigido por un fisioterapeuta o comunicación no verbal y verbal mediante juegos, son otros de los talleres que convierten a la piscina municipal en el mejor entorno para trabajar con los chicos y chicas, ya sea dentro del agua o sobre el césped.   Al frente de todos estos talleres hay diez personas: cinco monitores contratados, dos monitores en prácticas —del curso de monitores de actividades juveniles realizado por el Ayuntamiento este año— y tres voluntarios. Pero no son suficientes, desde la asociación se solicita una mayor participación voluntaria de los vecinos.   Escuelas de verano como ésta, no sólo ayudan a la integración de los chicos y chicas en la sociedad, también, a que la sociedad vea que con la ayuda de todos, son capaces de hacer lo que se propongan, y ganas no les faltan.