Este sábado, 18 de septiembre de 2010, se nombró oficialmente “Ciudadano Ilustre” a título póstumo, por el Ayuntamiento de Argamasilla de Alba, a D. Fermín Almarcha Díaz, que durante más de cincuenta años fue miembro de la Agrupación de Coros y Danzas “Mancha Verde”, «por su trayectoria humana y artística en el mantenimiento y desarrollo de las tradiciones, la música y el folklore, y su repercusión en Argamasilla de Alba y Castilla-La Mancha». Esta distinción fue conferida por la unanimidad del Pleno, el pasado martes 14 de septiembre.
Fermín nació en la “Argamasilla del Quijote” el 15 de julio de 1940, desde muy joven, igual que su padre, trabajó en labores agrícolas. Se casó con Jacinta el 20 de agosto 1966, fruto de este matrimonio tuvieron tres hijos: Tomás, Miguel Ángel y Carlos; que a su vez le dieron cuatro nietos Jaime, Marta, Nerea y Diego.
«Lo que más admirábamos de él era su sencillez, su humildad, su constancia en el trabajo sin ningún atisbo de arrogancia, su cabal honradez, su cordialidad, su modestia, su compañerismo, su sinceridad, su lealtad, su generosa nobleza y sobre todo su profundo amor a su tierra y a sus gentes», aseveró el alcalde de Argamasilla de Alba, José Díaz-Pintado, «Este homenaje ha sido posible gracias al gran numero de adhesiones que hemos tenido a este nombramiento, más de cien, de todo el tejido asociativo de la localidad», al que se han sumado agrupaciones folklóricas y culturales «de toda España», desde Barcelona a la isla de La Palma, y administraciones como la Diputación de Palencia. «Hoy su familia va a recoger el fruto de lo que ha ido sembrando a lo largo de su vida».
La emblemática “Casa de Medrano” de Argamasilla de Alba, fue el lugar elegido para ser testigo del homenaje de todo un pueblo, personalizado en la figura de su alcalde, que hizo entrega del título a la familia, ante cientos de argamasilleros que brindaron su reconocimiento, a una labor realizada durante más de medio siglo, con su presencia en el acto.
En nombre de la familia, Tomás Almarcha, agradeció el reconocimiento a su padre, «también quiero agradeceros a todas las personas que habéis intervenido en este acto, autoridades, presentadora, antiguos y actuales componentes del grupo, sin olvidarme de Pablo Martín, que ha sido el motor de este homenaje», y continuó diciendo, «el mejor de los homenajes no son los títulos ni los reconocimientos, sino el seguir trabajando por lo que él luchó durante tantos años. Mientras suene un laúd, una guitarra, unas castañuelas, mientras una voz cante una jota, mientras una pareja baile un fandango o una manchega, Fermín estará entre nosotros».
Por su parte, el delegado de la JCCM en Ciudad Real, José Valverde, afirmó que Fermín era «una persona que representaba como nadie los valores del castellano-manchego, defensor de todas sus tradiciones, el laúd era una prolongación poética de sus manos duras y callosas de labrador». «Hay gente, que sin pedir nada a cambio, da prácticamente toda su vida para que los demás puedan ir encontrándola a trozos por cualquier esquina de su pueblo o ciudad o en definitiva de su comunidad autónoma, y es un orgullo y honor poder participar en un acto de homenaje a Fermín Almarcha».
En representación de los antiguos componentes de la agrupación de Coros y Danzas, habló la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de la localidad, Josefina Porras, antigua componente del grupo. «Sé que si él pudiera haberse despedido de nosotros, lo hubiese hecho con una malagueña», y así finalizó su recuerdo al homenajeado, cantando una malagueña que le dedicó.
El presidente de la Agrupación de Coros y Danzas “Mancha Verde”, promotores de esta iniciativa, Pablo Martín, antes de iniciar su intervención, leyó una carta del Presidente de la JCCM, José María Barreda, con la que se sumaba a este homenaje: «Agradezco a Argamasilla de Alba que reconozca a sus ciudadanos ilustres cuya memoria ha de servir para honra de las personas y del lugar en el que viven», afirmaba el presidente en la carta.
«Fermín Almarcha Díaz ya es Ciudadano Ilustre de Argamasilla de Alba, pero también de La Mancha, del folklore y las tradiciones que nos devuelven a nuestras raíces, para recordarnos lo que fuimos y mostrarnos lo que seremos», aseveró Pablo Martín.
También participaron el presidente de la Federación Castellano-Manchega de Asociaciones de Folklore, Jesús Francisco Moreno, y la presidenta de los Académicos de la Argamasilla, Pilar Serrano Sánchez, que con su dogmática palabra afirmó: «Queda grabado en esta tierra que enmarca la luz del Alba para que todos tengamos un espejo en el que reflejarnos y compartir con nuestro Ciudadano Ilustre el pulso de su laúd en lo imperecedero», y recordando las palabras de Sancho Panza a la Duquesa en el quijote: «Donde hay música no puede haber cosa mala».
Como no podía ser de otra forma, hubo mucho baile, música y canciones. Los primeros en bailar y tocar fueron los antiguos componentes de Coros y Danzas, cerrando este homenaje la actuación de “Mancha Verde”, que presentó “La jota de Fermín”, una nueva composición de letra y baile, que en palabras de la presentadora del acto, Araceli Rodríguez, «perpetuará la memoria de Fermín, y dentro de cincuenta años cuando los niños aprendan estos pasos y letras conocerán la historia de este Ciudadano Ilustre de Argamasilla de Alba».
Fermín Almarcha Díaz, ‘Ciudadano Ilustre’ de Argamasilla de Alba
19 sep 2010·Ayuntamiento de Argamasilla