“La modernización de la zona regable de Peñarroya supondrá un importante ahorro de costes y agua para los agricultores de la zona"

El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, José Luis Martínez Guijarro, conoció hoy el proyecto de modernización integral de la zona regable de Peñarroya en Argamasilla de Alba (Ciudad Real) que ha supuesto la inversión de 32 millones de euros, subvencionados al cincuenta por ciento por el Gobierno regional y que como, aseguró, supondrá un importante ahorro de costes para el agricultor y del volumen de agua utilizada para la zona. Este proyecto afecta a una superficie regable de 7.688 hectáreas en la cuenca del Guadiana pertenecientes a unos 1.800 comuneros con parcelas ubicadas en los términos municipales de Argamasilla de Alba, en su mayoría casi un 90%, y el resto en Tomelloso y Campo de Criptana. Como explicó, “Castilla-La Mancha cuenta en su territorio con regadíos modernizados en un 93% de la superficie regable” así de los proyectos pendientes éste “era uno de los más significativos por ser muy demandado por toda la zona afectada”. El titular de Agricultura y Desarrollo Rural, que estuvo acompañado por el alcalde de Argamasilla de Alba, José Díaz Pintado, y el delegado de la Consejería en Ciudad Real, Francisco Chico, indicó que el planteamiento del proyecto es la modernización integral de la zona regable mediante el cambio del sistema de riego a presión, empleando fundamentalmente riego localizado por goteo, en el caso de cultivos leñosos y hortícolas y, en menor medida, por aspersión para el resto de cultivos herbáceos. Martínez Guijarro puso de manifiesto la especial relevancia del proyecto ya que supondrá un importante ahorro de agua de casi 15 hectómetros cúbicos, “una cantidad que en definitiva devolvemos al sistema hidráulico de la zona en pleno corazón de La Mancha, en el Acuífero 23”. Además de la propia modernización de regadíos, supondrá la mejora de las explotaciones agrarias y un importante ahorro de costes para los agricultores tanto en agua, como en energía y mano de obra ya que se tiende hacia sistemas de regadíos prácticamente automatizados, según explicó el consejero. “La agricultura es una base fundamental de la economía de Castilla-La Mancha y en esta zona de forma esencial. El objetivo del Gobierno del presidente Barreda es favorecer en la medida de lo posible el desarrollo de nuestros municipios y de los que ejercen su labor en ellos. Por eso hemos de intentar llevar a cabo proyectos e iniciativas que contribuyan a suprimir costes tanto de agricultores como ganaderos para que mejoren los rendimientos de las explotaciones agrarias de la región”, señaló. (Fuente: JCCM.es)