Las jornadas de teatro finalizan con gran participación de público

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Argamasilla de Alba se volcó con Tiquitoc Teatro que volvió a colgar el cartel con la obra ‘La corte del Faraón’
Entre el viernes trece y el domingo quince, el Centro Cultural de la “Casa de Medrano” de Argamasilla de Alba celebró las XXVI Jornadas de Teatro “Cueva de Medrano”, organizadas por el Área de Cultura del Ayuntamiento de la localidad dentro del programa “Verano Cultural 2010”, y en las que se han representado: el viernes 13, “Entre bobos anda el juego”, de Francisco Rojas Zorrilla, a cargo del grupo ‘In Vitro Teatro’; el sábado 14, “La corte del Faraón”, por ‘Tiquitoc Teatro’; y el domingo 15, el grupo ‘Fándula Teatro’ escenificó la obra “Las preciosas ridículas”.   Así, la compañía ‘In Vitro Teatro’, representó con diálogos muy ágiles en una sencilla puesta en escena, una divertida comedia, donde don Lucas del Cigarral, un rico hidalgo, feo, pretencioso y celoso, concierta a través de intermediarios su boda con doña Isabel de Peralta, una joven pobre, que está enamorada de don Pedro, primo de don Lucas, que de forma casual la salvó de morir ahogada.   Por su parte el grupo local ‘Tiquitoc Teatro’, consiguió que decenas de espectadores no pudieran acceder al recinto al completarse el aforo, pues su larga trayectoria, así como las obras que representan, garantizan la risa o al menos una alegre noche de teatro. Este año, su puesta en escena así como el vestuario de “La corte del Faraón”, volvió a sorprender al público asistente que recibió de buen grado la mezcla de diálogos, canciones y humor de esta obra; una zarzuela de enredo, propia de principios de siglo XX, y que su librista, Guillermo Perrín, llamaba "Opera Bíblica", donde destacó la representación del “casto José”, que consiguió atrapar a un público que reía tan sólo con verlo entrar en escena.   ‘Fándula Teatro’ cerró las jornadas con una adaptación libre de la obra “Las preciosas ridículas”, de Jean-Baptiste Popelin Molière, que construyó esta obra sobre la tesis de que el preciosismo llegó a París y se extendió por las provincias y a medida que se alejaba del centro del país se transformaba en una caricatura cada vez más ridícula. Así, Fándula Teatro en su adaptación, traslada la obra al Madrid de los años 60/70, donde en forma de sátira, muestra la realidad de dos mujeres recién llegadas a la capital, procedentes del Campo de Montiel, que quieren formar parte de la alta sociedad, llevando a la ruina con sus gastos al cabeza de familia. Como escarmiento, son engañadas por dos impostores, albañiles, que se hacen pasar por Marqués y Vizconde, a quiénes ellas finalmente rechazan al serles confesado el engaño.