
Una placa conmemorativa recordará a la figura de Casasayas en la Casa de Medrano
11 may 2005·Ayuntamiento de Argamasilla

Este es el texto que aparece en la placa conmemorativa que desde el pasado sábado 7 de mayo ocupa un lugar destacado en la Casa de Medrano de Argamasilla de Alba.
El Alcalde, José Díaz-Pintado, junto a Margarita Casasayas, hija del cervantista, fue el encargado de descubrir el pequeño tributo que Argamasilla de Alba ha querido hacer a la figura de Casasayas, estando acompañado en el acto del representante del Gobierno Balear; Miguel Melia; el representante de la Asociación de Cervantistas, José Carlos de Torres; el presidente de “Los Académicos de la Argamasilla”, Rodolfo Mateos; el amigo de Casasayas y Cervantista, Carlos Romero Muñoz y los hijos y hermana de Casasayas.
Díaz-Pintado, recordó una vez más como “por un triste capricho del destino” el Coloquio que se celebró hace 10 años en Argamasilla de Alba y el XII Coloquio Internacional que se ha celebrado en 2005 han tenido como protagonista al fundador y presidente de la Asociación de Cervantistas, José María Casasayas.
El primer edil argamasillero habló sobre la relación que Casasayas mantuvo con Argamasilla de Alba, una relación “de extensa e intensa amistad que comenzó con la organización del VII Coloquio Internacional hace ya diez años y que continuó con sus numerosas visitas a esta villa para participar en los Juicios Críticos de los Académicos de la Argamasilla culminando con la preparación de este XII Coloquio”. Además, como prueba de esta relación, Argamasilla de Alba, “El Lugar de La Mancha”, es desde 1999 sede de la Delegación Central de la Asociación de Cervantistas.
“Argamasilla de Alba está en deuda permanente con José María Casasayas”, dijo Díaz-Pintado. “Y por eso poco después de conocer su fallecimiento el Ayuntamiento de Argamasilla de Alba decidió participar en los premios de investigación de Ciencias y Humanidades Salviatore, dotando específicamente un premio de investigación que lleva su nombre, Premio José María Casasayas, además de perpetuar su memoria con una placa en esta Cueva de Medrano, precisamente en este lugar donde Cervantes concibió su genial Don Quijote, para que Cervantes y José María Casasayas sean invocados conjuntamente en este lugar”.
Por su parte, el presidente de los Académicos de la Argamasilla, Rodolfo Mateos, aprovechó su intervención para nombrar Académico de Honor a José María Casasayas haciendo un pequeño recuerdo de la relación que mantuvo la Asociación con el homenajeado.
En el acto también se presentó el último trabajo del cervantista, Don Quixot de la Mancha Traducción, edición y notas de José María Casasayas Truyols, 3 Tomos, Palma de Mallorca, 2005.
Fue su hijo Luis Casasayas el encargado de hacer los honores presentando oficialmente esta singular versión - es la primera versión íntegra al catalán “dialectal insular” de esta inmortal obra cervantina- , una obra de una envergadura insólita en la que Casasayas estuvo más de 30 años trabajando que incorpora numerosas notas explicativas que permiten al lector adentrarse en un mundo de detalles que amplían la panorámica de la novela.
En el volumen preliminar da cuenta de la vida y obra de Cervantes, presenta una síntesis argumental del Quixot, explica los entresijos histórico-lingüísticos de la traducción –donde lleva a emplear todo un abanico de variedades dialectales del idioma, adecuándolas a los personajes–, así como su personal visión de la evolución del mallorquín en su comunidad dentro del proceso de normalización del catalán. El autor defiende el habla del pueblo como su mayor e incuestionable tesoro cultural.